El béisbol nunca dejará de sorprendernos. Un buen ejemplo es la edición 63 del clásico de las bolas y los strikes, en el que los lanzadores están casi pidiendo el agua por señas, con efectividad de 5.21 y promedio oponente de los bateadores de .295. Sin embargo, en ese oasis ofensivo puede aparecer un serpentinero y desde lo alto de la lomita silenciar los maderos de una novena, justo como hizo este martes el diestro Pavel Hernández.
El tirador de los Leones de Industriales escaló al montículo del parque Latinoamericano y dejó sin jits ni carreras a los Cachorros de Holguín, que solo lograron poner par de corredores en circulación en todo el encuentro, aunque ninguno de ellos pasó de la segunda almohadilla. De esta forma, Pavel dio la victoria 7-0 a los capitalinos e inscribió su nombre en la hoja de récords de las Series Nacionales con el no hitter número 66 en estas lides.
Veamos algunas interioridades del trabajo del derecho y repasemos datos históricos sobre los juegos sin jits ni carreras en la historia de los clásicos domésticos.
* Pavel Hernández caminó las 9 entradas frente a Holguín con dominio absoluto. Solo le entraron en circulación dos efectivos de la tanda oriental: el patrullero Yasiel González por pelotazo en el primer capítulo y el inicialista Juan Cristian Onofre por error del antesalista Roberto Álvarez en el quinto. De ellos, Onofre logró avanzar al segundo saco por un wild pitch, pero de ahí no pasó. El derecho retiró a 8 rivales por la vía de los strikes y liquidó por su orden a los últimos 15 hombres que enfrentó.
Al margen del gran trabajo de Pavel, válido señalar que los Cachorros viven un pésimo momento ofensivo. Según el analista y estadístico Yasser Vázquez, quien trabaja directamente con la novena oriental, en los últimos 15 partidos antes de llegar a La Habana los holguineros eran el peor equipo del campeonato en average (.194), promedio de embasado (.295) y slugging (.244), con solo par de cuadrangulares en más de 400 turnos oficiales. Habrá que ver cómo responden después de este repaso de serpentinero de Industriales.
* Seguimos con más datos de Yasser Vázquez, quien tuvo el privilegio de presenciar el trabajo de Pavel Hernández en primera fila, justo detrás del plato. De acuerdo con su relato, el derecho de los Leones realizó una faena impecable, con gran control y velocidad sostenida de su recta y su slider, las principales armas de su arsenal.
“Su recta máxima fue de 91 millas (mph), y un total de 15 veces alcanzó las 90 mph. El promedio de sus 85 rectas estuvo sostenido en 88-90 mph. La slider marcó 81 mph con promedios entre las 78-80 mph”, señaló el estadístico.
Pavel tuvo mucho dominio con su rompiente, al punto que 76 % de ellos cayeron en zona y la mitad terminaron con sus contrarios abanicando la brisa. En líneas generales, los holguineros tuvieron una altísima tasa de 30 % de swines fallidos, mientras el serpentinero capitalino totalizó 122 picheos y consiguió un 68 % de strikes, o sea, puso 83 envíos en zona bateable.
Este último es un dato para remarcar, porque Hernández ha afrontado siempre muchos problemas con su control, de hecho, presenta un promedio de 5.40 boletos por cada 9 entradas en 7 Series Nacionales. Sin embargo, desde que se incorporó a Industriales hace solo unos días tras regresar de su contrato con los Rieleros de Aguascalientes, en México, solo ha otorgado un pasaporte gratis en 2 aperturas y 15 episodios de labor.
* Desde hace 42 años ningún lanzador de Industriales conseguía un no hitter de 9 episodios. El último en transitar la ruta completa sin permitir jits ni carreras con la casaca azul fue Ángel Leocadio Díaz, el 16 de enero de 1982, durante un partido de la 21 Serie Nacional. En aquella jornada no permitió libertades a Holguín y se llevó la victoria con pizarra de 2-0 en el parque Latinoamericano.
No obstante, válido señalar que después de Ángel Leocadio hubo otro lanzador capitalino que logró un no hitter de 9 entradas, pero vistiendo la camiseta de Metropolitanos. Hablamos de Osvaldo Fernández, quien pintó de blanco (6-0) a Citricultores el 10 de diciembre de 1988, durante la 28 Serie Nacional.
* Coincidentemente, el único no hitter que habían recibido los holguineros en su paso por los clásicos domésticos fue el que acabamos de mencionar de Ángel Leocadio Díaz. En total pasaron 42 años sin probar este trago amargo. De los equipos activos en la Serie Nacional, los Cachorros tenían la racha más larga sin recibir juegos de cero jits y cero carreras, pero Pavel Hernández les rompió el encanto y, de paso, cortó sus aspiraciones de llegar al récord absoluto.
Dicha marca está en poder de Pinar del Río, que pasó 49 años sin recibir no hitters, desde 1971 (Aniceto Montes de Oca-Azucareros) hasta 2020 (Arnaldo Rodríguez-Ciego de Ávila).
* Industriales igualó a Camagüey como los equipos que más juegos sin jits ni carreras (6) han propinado en la historia de las Series Nacionales. Pavel Hernández se sumó a una prestigiosa lista de lanzadores capitalinos con no hitters, integrada por Jesús Pérez (vs. Vegueros en 1968), Andrés Liaño (vs. Pinar del Río en 1969), Rigoberto Betancourt (vs. Oriente en 1970), Ángel Leocadio Díaz (vs. Holguín en 1982) y David Mena (vs. Villa Clara en 2017).
Además de ellos, otros serpentineros de equipos habaneros también han completado la hazaña, como Walfrido Ruiz y Elpidio Páez (Habana vs. Camagüey en la décima Serie), Orlando “El Duque” Hernández (Ciudad Habana vs. Matanzas en la Selectiva de 1990) u Osvaldo Fernández (Metropolitanos vs. Citricultores en la Serie 28).
* El parque Latinoamericano tiene un imán para los cero jits cero carreras en los clásicos beisboleros cubanos. El Coloso del Cerro ha sido testigo de 14 partidos de estas características en la historia de las lides domésticas, algunos de ellos muy recordados por la fanaticada. Por ejemplo, allí Aquino Abreu logró el segundo de sus 2 no hitters consecutivos en 1966, cuando pintó de blanco en salidas sucesivas a Occidentales e Industriales en un plazo de 9 días. Jamás se ha repetido algo así.
El Latino también acogió el último juego sin jits ni carreras que se dio en la era del bate de aluminio, protagonizado por el tunero José Miguel Báez el 17 de noviembre de 1998. Ese día, el derecho anuló a la ofensiva de Metropolitanos y salió con la victoria 6-0.
El resto de los lanzadores que han propinado no hitters en el feudo habanero son Leopoldo Vázquez (con Habana en 1968), Andrés Liaño (con Industriales en 1969), Rigoberto Betancourt (con Industriales en 1970), Oscar Romero (con Camagüey en 1975), Ángel Leocadio Díaz (con Industriales en 1982), José Manuel Pedroso (con Habana en 1982), Osvaldo Fernández Guerra (con Metropolitanos en 1988), Osvaldo Fernández Rodríguez (con Holguín en 1992), Fernando Tejeda (con Camagüey en 2004), Maels Rodríguez (con Centrales en 2004), Jorge Alberto Martínez (con Matanzas en 2009) y ahora Pavel Hernández.
Detrás del Latinoamericano, los estadios con más partidos sin jits ni carreras en Series Nacionales son el Augusto César Sandino de Villa Clara (11) y el Cándido González de Camagüey (7).
Contra Reloj: No hitters cubanos, pasado y presente (+Podcast)
* Entre el 19 de septiembre de 2017 y el 17 de abril de 2023 se dieron 10 juegos sin jits ni carreras en los clásicos beisboleros cubanos. Lo curioso es que en 9 de ellos los lanzadores necesitaron 7 o menos innings para entrar en los libros de récords, ya sea por partidos recortados por la lluvia, nocaos y super nocaos. En ese lapso, solo el espigado avileño Arnaldo Rodríguez consiguió un no hitter de 9 episodios, contra Pinar del Río el 29 de octubre de 2020.
Sin embargo, la tendencia parece revertirse, pues los últimos 3 choques de cero jits y cero carreras han sido en duelos a 9 capítulos. Los protagonistas de estos encuentros han sido el matancero Renner Rivero (vs. Pinar del Río) y el novato villaclareño Osdany Rodríguez (vs. Sancti Spíritus), ambos en mayo del pasado año, y ahora Pavel Hernández.
* En 63 Series Nacionales tenemos 66 no hitters, lo que nos da la medida de que no es para nada sencillo completar la hazaña. Este camino de lo inauguró el gran Aquino Abreu en 1966, cuando propinó dos juegos sin jits ni carreras en salidas consecutivas.
Después, un total de 70 lanzadores han estado involucrados en estos duelos, porque tenemos un no hittter a 3 manos (Juan Ramón Gómez, Pablo Castro y José Brizuelas con Granma en 1979) y 2 a 2 manos (Walfrido Ruiz y Elpidio Páez con Habana en 1971-Raimar Navarro y Pablo Millán Fernández con Holguín en 2012).
De los 66 juegos sin jits ni carreras en los clásicos domésticos, 21 fueron en la era del bate de aluminio, lo cual coloca a los protagonistas de esos choques en otra dimensión. Dominar en esos tiempos a las artillerías de cualquier equipo era casi misión imposible, pero algunos lo lograron. El primer no hitter en la época del aluminio estuvo a cargo de Porifirio Pérez (con Forestales vs. Habana) en el parque Capitán San Luis. Tras él, otros ilustres como Omar Carrero, Julio Romero, Jorge Luis Valdés, Faustino Corrales o Rogelio García en par de ocasiones también lo consiguieron.
* De la quinta a la décima Serie Nacional tuvimos al menos un partido de cero jits cero carreras en cada una de esas temporadas. En total, fueron 6 campañas seguidas con duelos de estas características. Ahora ya llevamos 7 campañas consecutivas con no hitters. La seguidilla comenzó en la edición 57 del clásico doméstico con David Mena (Industriales), quien blanqueó a Villa Clara en un choque recortado por la lluvia. Esta es la racha más larga en la historia del certamen, lo cual es tremendamente sorprendente, porque los últimos años han difíciles para los lanzadores en Cuba.