El jefe del comité organizador de la Copa del Mundo de fútbol de 2018, Alexei Sorokin, descartó que una plaga de langostas pueda afectar los terrenos de juego durante el torneo en Rusia.
Sorokin respondió así a una advertencia del ministerio de agricultura de que los saltamontes podrían descender sobre el césped de los estadios en las ciudades en el sur de Rusia.
Sorokin afirmó que “los saltamontes no son un peligro para los campos de juego” porque “el césped en las canchas es muy corto, y es regado con ciertas sustancias”.
Agregó que “hay que ver esto con cierto sentido del humor, no se puede decir nada más. No es una amenaza”.
Las plagas de saltamontes son un problema habitual en el sur de Rusia, donde suelen devorar plantaciones enteras en los meses más cálidos.
El gobierno ruso dijo el miércoles que una plaga de langostas podría “deshonrar” al país al destruir los campos de juego de la Copa del Mundo.
Las langostas frecuentemente devoran los cultivos en el sur de Rusia. Pyotr Chekmaryov, supervisor de protección de cultivos en el Ministerio de Agricultura, dijo que también podrían descender sobre los estadios.
Añadió que “a las langostas les gustan los lugares donde hay mucho verde”. Es importante, añadió, “no sufrir una deshonra frente a la sociedad global, sobre todo donde tendremos huéspedes de todo el mundo”.
Chekmaryov dijo que la región de Volgogrado podría ser la más afectada, y es una de las sedes de la próxima Copa del Mundo de 2018.
AP / OnCuba