Los Juegos han llegado a su ecuador. Llevan ya una semana de contiendas, han repartido casi la mitad de sus coronas y ovacionado a atletas de todos los confines. Entre tanto bullicio y emociones, le propongo un ‘stop’ pasajero para compartir este decálogo de cosas que he corroborado o aprendido después de un centenar de horas ante la pantalla.
1.- Aprendí que el balonmano y el voleibol de playa son deportes más atractivos que el basket, a pesar de que éste haya reclutado a una legión de jugadores de la NBA y de su versión para mujeres, la WNBA. Siempre había pensado lo contrario, pero gracias al esfuerzo del piquete aguerrido de la televisión cubana he entendido que puedo vivir sin Melo Anthony, Kevin Durant y compañía. Un descubrimientazo.
2.- Confirmé que Michael Phelps es el atleta más grande de la historia. Por resultados. Por virtudes naturales. Por hambre de medallas. Por su serenidad ante el triunfo y el revés. El abrazo que le dio al joven Schooling es una lección para la vida.
3.- Me cercioré de que los chinos van a tomar el mundo del deporte. No será para Tokio 2020, pero a la vuelta de unos ciclos estivales vencerán en la tabla general por la clásica milla. Han escalado al podio en 12 de los 19 deportes que ya entregaron premios, y contando. Aquello de ‘tener un chino atrás’ será una obligación inevitable.
4.- Fortalecí el criterio de que el boxeo olímpico reclama una inyección de calidad. Todo torneo tiene competidores de segunda, pero aquí casi todos lo son, excepción hecha de unos cuantos cubanos y alguien más. Es terrible advertir que el noble arte –como lo definió Cortázar– se nos haya convertido en el remedo de una bronca callejera.
5.- Descubrí que Katie Ledecky debía ser suspendida de por vida por ridiculizar a sus rivales.
6.- Reparé en que se van diluyendo los estereotipos raciales que prescribían que ciertas modalidades eran única y exclusivamente para tal o más cual color de piel. Los negros brillan en gimnasia y natación, los blancos presionan en pruebas de velocidad y fondo, los asiáticos dan guerra en tenis y ciclismo…
7.- Comprobé que Mo Farah tiene a Sandokan en su árbol genealógico. El inglés es un tigre, un animal competitivo como se han visto pocos. Anda solo entre fieras etíopes y kenianas, les hace un rato el juego, las sofoca otro rato, y después las despacha a zarpazos con esas piernas fúnebres y flacas. Un portento.
8.- Acepté que los relevos generacionales son la cara dialéctica y más enternecedora del deporte. Vi a Shelly-Ann Fraser-Pryce sonreír abiertamente con Elaine Thompson, compatriota y victimaria; y a Tirunesh Dibaba, esa leyenda, festejando su bronce con la nueva matrona del fondo, Almaz Ayana. Dos postales de generosa deportividad.
9.- Me convencí de una vez y por todas de que el béisbol no puede estar fuera de las Olimpiadas. Al menos no mientras sean convocados el rugby, el polo acuático, la gimnasia en trampolín, las velas…
10.- Comprendí que la prensa cubana escribe sus pronósticos con los pies lejos de la tierra, levitando. Y que ser mesurado a la hora de hacer vaticinios puede implicar que te consideren, en el mejor de los casos, pesimista. Tal parece que para ser ideológicamente confiable –que es el término al uso– hiciera falta vaticinarle una medalla a cada compatriota.
muy bueno, se te olvidó mencionar la fraternidad, y los rencores q flotan aún, las dos Corea, Israel y Egipto…
Corto, certero, elegante. Ta bueno este resumen de la primera mitad. Felicidades.
Genial!!! lástima que tengamos un solo canal deportivo y tengamos que verlo casi todo tan apretado.
Mohamed (Mo) Farrah es Somalí de nacimiento. Así que los genes están más cerca de etíopes y kennyanos que del Malayo Sandokan.
Witzig, cuando hice alusión a Sandokan fue porque lo apodaban El Tigre de la Malasia, no porque estuviera refiriéndome al lugar de nacimiento de Farah. Saludos
Me gusta muchísimo este trabajo que se enriquece con los comentarios que han vertido los lectores. Es una lástima que nuestros periodistas y comentaristas no acaben de aprender las lecciones a pesar de tanto camino que tienen recorrido. ¿Quién le iba a decir a Phelps (seguro que ni él lo imaginó) que ocho años después de su encuentro quizás fortuito con el niño Schooling, éste iba a ser su rival y categórico vencedor en la alberca olímpica? Bonitos gestos de Phelps en 2008 y 2016 que dejan para la historia esa dos elocuentes instantáneas.
Estoy de acuerdo con usted en todos los puntos de este decálogo excepto en el punto 1 pues para nada el balonmano y el voleibol de playa sean deportes más atractivos que el baloncesto pues este es el mas dinamico de todos los que se practican a nivel mundial, lo que pasa es producto del poco interés que le brinda la NBA a las olimpiadas. Se imagina a un Curry y a un Lebron jugando ambos pero eficientemente en estas olimpiadas? Seria un espectáculo gigante, como el vivido cuando el Dreamteam americano del 92. Sin lugar a dudas resaltar que el señor Michael Phelps es el MEJOR ATLETA QUE EXISTE SOBRE LA FAZ DE LA TIERRA.
Es muy perjudicial ligar política con deportes,las coreanas está bien lo que hicieron ,me preocupa la suerte que corra la del Norte.
Muy atinado tu decálogo. Mucha lógica y sensatez. Especialmente de acuerdo en el punto 10.
Daniel, era ironía compadre. El baloncesto es uno de los mejores deportes de la galaxia.
muy bueno el comentario estimado colega pero , no estoy de acuerdo con lo que usted dice en el numero tres , esta haciendo un pronostico muy ligero ya que para chinos ganen de nuevo por equipo en una olimpiada tienen que trabajar duro , en el 2008 felicitaciones porque lo lograron , pero la de Londres y la de Brasil me parece que ya tienen un ganador y las que le quedan todavía
No coincido con el ultimo punto pues la prediccion de medallas la dio una revista de deportes y creo que americana para mas señas. No ha sido muy atinado pues da pena que quiera ironisar à la prensa cubana de la cual forma parte por estar ahi. Yo pienso que todos los cubanos, o bien todos los paises, quieran que sus atletas alcancen medallas. Hace falta preparacion y voluntad pero mire cuantos se han accidentado estando en la punta y el pronostico cambio. El deporte tambien necesita suerte. Gracias.
Dos cosas:
-Nada supera al basket y a los jugadores y jugadoras de baloncesto de USA, los play se vuelven un poco aburrido al ver la superioridad, pero asi todo te encandilan la vista con su juego MUYYYYYY diferente y distante al del resto del mundo
– JAMAS !!!!, ni de aki a 20 ciclos olimpicos China alcanzara o le ganara a los Estados Unidos en una olimpiada a no ser que los chinos las organicen, las ganas que tienes tu de ver fracasar a los USA ( tu comentario sobre el basket lo reafirma) pero viviras todos los dias de tu vida con esos deseos
Ceiba, predicciones hay tantas como personas que siguen el deporte. Yo me refería única y exclusivamente a las de la prensa nacional. Saludos
Carlitos, le digo lo mismo que le dije en este mismo foro a Daniel. Saludos
!!!Bueno, bueno, buenísimo!!! pero hubiese querido que no fuera una ironía lo del Balonmano. Los atractivos están condicionados también por patrones culturales, mecanismos comerciales y los medios. Con los deportes pasa igual que con la ropa, los autos, las mujeres: nadie sabe por qué pero, linda=rubia de ojos azules con 1,75 m de estatura y gran fondillo, si no cumple con estos requisitos no es elegible ni como dama de ceremonia en la premiación de la Serie Nacional de Beisbol (por cierto Juan Kubala, pudo haber un onceno punto para los voluntarios). El balonmano es un deporte super atractivo y espectacular… para el que le guste, entre los que me incluyo. En muchos países de Europa tiene más seguidores (tanto jugadores como espectadores) que el basket y hasta llega a hacerle sombra al Futbol. Una jugadora de Balonmano en Dinamarca tiene tanta o más publicidad que Messi. Simplemente, los cubanos no tenemos cultura de Balonmano (aun y cuando hemos tenido mejores y más resultados en Balonmano que en Futbol, hasta un lider goleador creo que tuvimos en el mundial de 1985, Julián Durañona). Por suerte en Cuba se habla beisbol aunque muchos se esfuercen porque el futbol sea nuestro deporte nacional (o, al menos, eso parece). Lo de los medios, para que contar. Casi he llegado a pensar que en Cuba no se pondrá de moda la guayabera hasta que no aparezca CR7 en un anuncio con una puesta. Los chinos quizás no lleguen a dominar el medallero nuevamente (sigo pensando que en el 2008 fueron muy beneficiados, sobre todo en los deportes de apreciación) pero, de seguro, lo van a “extreñir” bastante porque han empezado a enfocarse en muchas especialidades y a destacarse en aquellas donde la técnica da más frutos que la fuerza y la velocidad o donde por mucha fuerza y velocidad que se tenga no se llega a ninguna parte sin una buena técnica (vi tres chinos en el triple salto del atletismo casi y solo casi con la técnica de los cubanos llegar bien lejos). Lo de la prensa deportiva cubana y el aguerrido piquete del canal de los deportes en Cuba… triste. Quieren quedar bien con todo el mundo y, si eso es difícil, hacerlo con objetividad es imposible. Eso sí, queda claro su chovinismo y antimperialismo y con eso basta, lo importante es que el televidente comprenda lo injusto que es el sistema de eliminatorias olimpicas de los yanquis (los tryouts) que, según Rodolfo García, había dejado fuera de la olimpiada a Kendra Harrison después de haber roto el record mundial de 100 c/v (no sé como logró reconocer que no era así, que la muchacha había quedado quinta en los tryouts y el record lo rompió cuando ya estaba conformado el equipo olímpico); al final, cuando las americanas se llevaron las tres medallas fui yo el que se quedó sin ver la repetición y la tabla de los tiempos, después que me tuve que disparar a los lanzadores de javalina sacándose los mocos todo el tiempo que duró la premiación de Orlando Ortega. Repugnante, no tiene otro calificativo.