El izquierdista Yamandú Orsi, ganador de las elecciones en Uruguay el pasado noviembre, fue investido este sábado como presidente de ese país hasta 2030.
El representante del ahora oficialista Frente Amplio, asumió el cargo en una ceremonia celebrada en el Palacio Legislativo frente a los integrantes de la Asamblea General y los representantes de los diferentes países invitados, reseña la agencia EFE.
En su discurso de investidura, Orsi resaltó a Uruguay como una “amalgama plural de convivencia que aún despierta asombro en el mundo” y expresó su deseo de encabezar un Gobierno “que se caracterice por el principio de humanidad”.
Además, el considerado el heredero político del expresidente José Mujica —quien asistió a la ceremonia—recordó que hace 40 años el país recuperaba la democracia tras vivir “el período más doloroso” de su historia.
“Hay secuelas de ese periodo que continúan hasta hoy. Por eso es tan justo como imprescindible mantener intacto el compromiso con la libertad, la verdad y la justicia”, señaló Orsi, quien devuelve al Frente Amplio al poder tras cinco años de gobierno del conservador Luis Lacalle Pou.
“La democracia también goza de buena salud cuando sus instituciones son sólidas, cuando la justicia es igual para todos y cuando se defiende a ultranza el mandato republicano de la independencia entre poderes”, subrayó, según el reporte del medio español.
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Amplia presencia latinoamericana, pero sin Cuba
En un segundo acto, Orsi, y la vicepresidenta, Carolina Cosse, abordaron en el Palacio Legislativo de Montevideo un vehículo eléctrico para desfilar por las calles de la capital. Rodeados de miles de personas se dirigieron hacia la Plaza Independencia para la entrega de la banda presidencial.
Esa ceremonia, señalada como la de mayor participación desde el reinicio de la democracia en Uruguay, contó con la presencia de distintas autoridades e invitados internacionales.
Entre los asistentes se cuentan el rey de España, Felipe VI, y los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; Bolivia, Luis Arce; Chile, Gabriel Boric; y Colombia, Gustavo Petro.
También los mandatarios de Guatemala, Bernardo Arévalo; Honduras, Xiomara Castro; Panamá, José Raúl Mulino; Paraguay, Santiago Peña, y República Dominicana, Luis Abinader.
Sin embargo, no asistieron ni el mandatario de Cuba ni los de Venezuela y Nicaragua pues fueron vetados por el presidente saliente. Lacalle Pou ha sido muy crítico con los Gobiernos de esos países y bloqueó su invitación a la investidura de Orsi.
De acuerdo con el protocolo oficial en Uruguay, citado por la prensa, el Gobierno en funciones canaliza a través de la Cancillería las invitaciones del Gobierno entrante, pero estas deben ser autorizadas por el presidente en ejercicio, cosa que no sucedió ahora.