El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó hoy lunes una ley que prohíbe a los ciudadanos chinos comprar tierras en el estado a menos que se encuentren naturalizados como estadounidenses o sean residentes permanentes.
El motivo es eminentemente político y parece dirigido a lograr más apoyo de los electores conservadores de origen foráneo que han arribado a Florida procedentes de países como Cuba, Venezuela o Nicaragua. Según dijo DeSantis en rueda de prensa, no quiere al Partido Comunista Chino (PCCh) en el estado del Sol y “se debe mantener a Florida como un estado libre”.
La presencia china en Florida es limitada, aunque en el norte de Miami existe un incipiente barrio chino al estilo de Nueva York o San Francisco, en parte debido al gran número de chinos que se han asentado en Latinoamérica y utilizan a Miami como puerta comercial, como muchos empresarios de la región.
El gobernador republicano destacó las preocupaciones sobre el “esfuerzo concertado” del PCCh para adquirir tierras de cultivo en todo Estados Unidos, incluyendo Florida.
DeSantis agregó que la seguridad alimentaria es seguridad nacional, por lo que no quiere que el PCCh esté a cargo de ninguna producción de alimentos en el estado.
Según el Departamento de Agricultura, China poseía 352 140 acres de tierra estadounidense en 2020, alrededor del 1% del total de acres en manos extranjeras, mientras que los inversionistas canadienses poseían la mayor parte de estas tierras (12.4 millones de acres el mismo año).
La ley también prohíbe a los ciudadanos de Rusia, Irán, Siria, Corea del Norte, Cuba y Venezuela poseer tierras dentro de las 10 millas de bases militares e infraestructura crítica, como aeropuertos y centrales eléctricas. Sin embargo, solo a los residentes de China se les prohibiría poseer tierras en cualquier lugar de Florida.
El proyecto de ley fue tuvo la oposición de personas chino-estadounidenses que testificaron contra la propuesta por temor a que pudiera conducir a la “discriminación”, según dijeron. También temían que se les impidiera comprar casas si aún no se habían convertido en residentes permanentes.
DeSantis firmó dos proyectos de ley adicionales para reducir la influencia de China en Florida. El proyecto de ley SB 258 bloquea el acceso a aplicaciones como TikTok en dispositivos y redes gubernamentales, mientras que el SB 846 prohíbe que las universidades y colegios del estado acepten subvenciones de “países extranjeros de interés“ o participen en asociaciones con universidades con sede en dichos países, a menos que se cumplan condiciones específicas.
En 2019, el Miami Dade College cerró la filial del Instituto Confucio precisamente por ser subvencionada por el gobierno de Beijing.