El Senado de EE.UU. ya tiene los 51 votos necesarios para aprobar una resolución anulando la declaración de emergencia de Donald Trump, que busca gastar miles de millones de dólares para construir un muro en la frontera sur.
El senador Rand Paul, de Kentucky, se unió a otros tres republicanos –Susan Collins, de Maine, Lisa Murkowski, de Alaska y Thom Tillis, de Carolina del Norte–, al anunciar que apoyaría la medida. Ahora los demócratas cuentan con los votos que necesitan para asegurar la resolución y forzar a Trump a emitir el primer veto de su presidencia.
“No puedo votar para darle al presidente el poder de gastar un dinero que no ha sido apropiado por el Congreso. Es posible que queramos más dinero para la seguridad fronteriza, pero el Congreso no lo autorizó. Si quitamos esos cheques y balances, es peligroso”, dijo Paul.
Esta oposición bipartidista a la política del presidente sobreviene después del estancamiento que produjo el cierre gubernamental más prolongado de la historia. A mediados de febrero el Congreso finalmente llegó a un acuerdo para gastar solo 1,375 mil millones de dólares en cercas a lo largo de la frontera, bastante lejos de los 25 mil millones que Trump había pedido para su muro después de haber prometido durante mucho tiempo que México lo pagaría.
El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McDonnell, reconoció que el Senado aprobará una resolución bloqueando la declaración de emergencia del presidente en la frontera sur.
Hablando en un evento, dijo: “Creo que lo que está claro en el Senado es que habrá suficientes votos para aprobar la resolución de desaprobación, que luego será vetada por el presidente”.
A juicio de expertos, sus comentarios subrayan su incapacidad para proteger al presidente de una reprimenda bipartidista, aunque agregó que esperaba que la Cámara de Representantes respetaría el veto del presidente.
No se ha fijado aún una fecha para la votación, pero probablemente ocurra antes del 15 de marzo. Rand Paul dijo ayer que hasta diez republicanos votarían contra el presidente.
Una vez que Trump emita su veto, es casi seguro que el asunto vaya a los tribunales, donde ya se han presentado múltiples demandas. Se usaría como evidencia de que el presidente está desafiando la voluntad del Congreso y abusando de su poder de manera inconstitucional.
Que viva el balance de poderes de EE>UU ! Ni siquiera los republicanos “le hacen la pelota” al presidente. En el parlamento cubano aprueban todo por mayoria y sin un voto en contra. Eso si es una verguenza !