Rusia pudiera desplegar infraestructura militar en países fuera de Europa, como Cuba y Venezuela, para frenar la expansión de la OTAN hacia sus fronteras, según las declaraciones ofrecidas este jueves por su viceministro de Exteriores, Serguéi Riabkov, al canal RTVI.
“No quiero confirmar nada ni descartar nada”, señaló el diplomático ruso interrogado sobre el tema, según la reseña de la entrevista publicada en el sitio web de RT, que no precisa si esa posibilidad ha sido manejada ya con los gobiernos de las naciones donde podría desplegarse la infraestructura rusa.
“En el estilo americano, la opcionalidad de la política exterior y militar es la piedra angular para asegurar la poderosa influencia de ese país en el mundo. Depende de las acciones de los colegas estadounidenses”, añadió Riabkov.
Esta posibilidad, esbozada por el viceministro ruso en medio de la crisis diplomática entre su país, Estados Unidos y los miembros de la OTAN por las tensiones que se viven en la frontera con Ucrania, hace revivir momentos de la Guerra Fría, cuando la entonces Unión Soviética desplegó misiles en Cuba y colocó al mundo muy cerca de otra guerra de alcance global.
De acuerdo con RT, el alto cargo recordó que el presidente Vladímir Putin ha hablado repetidamente sobre qué medidas se pueden tomar, por ejemplo, en conexión con la Armada rusa “si las cosas van completamente en la dirección de provocar a Rusia y fortalecer aún más la presión militar” sobre Moscú desde Washington. “No queremos esto, los diplomáticos deben llegar a un acuerdo”, dijo.
Riabkov señaló, además, que “Rusia es ahora el principal oponente de la OTAN solo porque se esfuerza por defender de manera firme y consistente sus propios intereses y se preocupa por su seguridad”.
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En cuanto a las preguntas de Occidente sobre la concentración de tropas de Rusia en su propio territorio, el viceministro de Exteriores dijo que puede hacer una contrapregunta: “¿Qué hacen las tropas estadounidenses a miles de kilómetros de sus bases?”, refiere RT.
En opinión del alto cargo ruso, esto no se puede explicar por cuestiones de seguridad de la alianza, ya que esta seguridad “no se debe proporcionar en detrimento de otros países”.
En cuanto a otros aspectos de la política exterior, Riabkov declaró que EE.UU. y sus aliados de la OTAN no están preparados “bajo ninguna circunstancia” para cumplir con las demandas clave de Moscú acerca de garantías de seguridad, como la no expansión de la alianza atlántica hacia el este, la reducción de su infraestructura militar y no desplegar sus sistemas en las inmediaciones de las fronteras rusas.
En ese sentido, y de acuerdo con RT, el viceministro de Exteriores lamentó que EE.UU. y la OTAN estén dispuestos a hablar solo sobre aquellos temas de garantías de seguridad que les convienen.
“En elementos clave de estos textos, EE.UU. y sus aliados nos dicen en realidad ‘no’, y en los que nos dicen ‘sí, sigamos discutiendo’, observamos que, aunque estos temas son importantes y serios, son secundarios a la no expansión de la OTAN”, señaló. “Se trata, en cierta medida, de un callejón sin salida o una diferencia de enfoque”, resaltó Riabkov.
En cuanto a Ucrania, el diplomático subrayó que Washington está escalando la situación cerca de las fronteras rusas y advirtió que “podría haber cualquier provocación”, especialmente cuando Moscú tiene “vecinos como la actual Ucrania, que se deleita en la ilusión de la venganza, está buscando razones para finalmente abandonar la implementación del paquete de medidas de Minsk, y que especula con el apoyo imprudente y desenfrenado de Occidente”, refleja la información de RT.
“No permitiremos que se culpe a nadie por las consecuencias potencialmente muy graves de esto. Simplemente advertimos que se necesita un retroceso de la OTAN”, enfatizó Riabkov.
Puro humo. Para comenzar: ¿cómo piensan los rusos mantener a 11 millones de cubanos?, porque con esas amenazas no esperen que el gobierno americano se seguirá haciéndose el sueco con el trapicheo que hay de aquí para allá. Eso si no decide meter los marines de una vez.