Cuba apelará a la inversión foránea para rehabilitar su red de balnearios de aguas termo-minero-medicinales, informó al diario Granma la doctora Miladys Orraca, presidenta de la Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos.
“A partir de la aprobación de la Ley de Inversión Extranjera en Cuba, una de las inscripciones realizadas por nuestra Comercializadora para la cartera de Oportunidades fue precisamente la rehabilitación de estos balnearios y ya existen varias agencias a nivel internacional que mostraron su interés en ser socias de su inversión, para poderlos explotar”, aseguró Orraca, también miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC).
Según la directiva, su empresa se ecuentra “en el proceso de concretar el proceso de inversión e iniciar la restauración de estos inmuebles con el estándar requerido para la comercialización de sus servicios”.
La información de Granma precisa que los primeros balnearios cubanos que serán rehabilitados son los de San Miguel de los Baños, en Matanzas; San Diego de los Baños, en Pinar del Río; y Ciego Montero, en Cienfuegos, “como parte de un proceso paulatino de restauración”.
“Paulatinamente vamos a alcanzar un desarrollo en este campo, en la medida de las posibilidades económicas, pues estamos llamados por la alta dirección del país a explotar e implementar los procesos de inversión extranjera”, explicó la doctora Orraca, quien asistió en Cienfuegos a la puesta en marcha del Centro de Bienestar y Calidad de Vida de Yaguanabo, el cual ofrecerá diversas modalidades terapéuticas para extranjeros, entre ellas servicios de talasoterapia o tratamiento con aguas marinas con propiedades físico químicas beneficiosas.
Cuba se abrió al capital extranjero como parte del proceso de reformas económicas impulsadas por el expresidente Raúl Castro y su sucesor, Miguel Díaz-Canel, ha insistido en que la inversión extranjera debe ser una “prioridad”.
El proyecto de nueva Carta Magna, actualmente a debate popular tras su aprobación por la Asamblea Nacional en julio pasado, reconoce a la inversión extranjera como un “elemento importante para el desarrollo económico del país”, al que el Estado cubano “promueve y brinda garantías”.
Recientemente el gobierno cubano simplificó el proceso para la aceptación de los proyectos y agilizar la captación de capital foráneo. También abrió la puerta para la inversión extranjera en el sector ferroviario, hasta ahora en manos del Estado.
Las autoridades de la Isla han reconocido que necesitan 2,500 millones de dólares al año en inversión extranjera directa para garantizar el sostenimiento económico nacional. En 2017, logró por primera vezcaptar más de 2,000 millones de dólares, según confirmó el ministro cubano de Comercio Exterior, Rodrigo Malmierca, en la 35 Feria Internacional de La Habana.
En 2016 Cuba sufrió su primera recesión económica en más de dos décadas (-0,9 por ciento), pero repuntó en 2017 con un 1,6 por ciento de crecimiento, según los datos oficiales. En el primer semestre de 2018 el crecimiento fue un “discreto” 1,1 por ciento debido a “factores adversos”, dijo Díaz-Canel en la Asamblea Nacional.
Para este año Cuba prevé crecer un 2 por ciento, mientras que las proyecciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) estiman un crecimiento del 1 por ciento.