Los vaivenes en el crecimiento de las cifras de infectados por el coronavirus Covid-19 generan tanto optimismo como dudas, y resaltan los contrastes entre la posición de las autoridades chinas y la preocupación reinante en muchos países del mundo.
Este jueves, funcionarios de salud de Beijing se mostraron optimistas sobre el control del brote, aunque salieron a la luz inquietudes sobre la trayectoria real de la epidemia, luego de que China cambió nuevamente su método de conteo, y por la aparición de nuevas amenazas fuera del país.
“La tendencia a la baja no se revertirá”, aseguró Ding Xiangyang, subsecretario general del Consejo de Estado e integrante del grupo de supervisión del Gobierno Central, tras conocerse que el número de nuevos casos en China bajó hasta 394, tras los 1.749 dados a conocer un día antes.
También este jueves, fueron reportadas otras 114 muertes en China por el virus.
Pero dichas estadísticas salieron a la luz luego de un cambio en la forma en que los nuevos casos son contados, lo que ha hecho que muchos se muestren cautelosos y preocupados sobre cuál puede ser el escenario real.
La semana pasada, la Comisión Nacional de Salud de China informó que funcionarios en Hubei registrarían nuevas infecciones sin esperar los resultados de las pruebas de laboratorio, apoyándose en su lugar en los análisis de los médicos y tomografías pulmonares. Sin embargo, el jueves retomó su manera previa de conteo, una decisión que sin duda exasperó a los observadores que consideran que la consistencia es la clave para comprender el camino del COVID-19.
Además, la amenaza del contagio sigue siendo alta, por lo que muchos países de todo el mundo no bajan la guardia y luchan frente a la reacción en cadena que genera la enfermedad.
El frente más reciente en el extenso combate a nivel mundial contra el COVID-19 surgió en Daegu, Corea del Sur, donde las autoridades exhortaron a los 2,5 millones de habitantes de la ciudad a permanecer en lugares cerrados y portar cubrebocas en todo momento para contener más infecciones.
El alcalde Kwon Young-jin hizo un llamado por televisión para que se tomen esas medidas preventivas, y advirtió que una racha de nuevos casos podría abrumar el sistema de salud. Además, pidió ayuda al gobierno central del país.
Daegu y poblaciones circunvecinas reportaron 35 nuevos casos del coronavirus este jueves. El brote se registró a más de 1.400 kilómetros de distancia del epicentro del COVID-19 en la provincia china de Hubei y su capital de Wuhan, una señal de los riesgos que el virus potencialmente representa para las comunidades de la región y más allá.
Si bien todos excepto aproximadamente 1.000 de los más de 75.000 pacientes registrados hasta hoy en el mundo han sido reportados en China, casos dispersos han surgido en otras partes.
El gobierno de Irán reveló el jueves las dos primeras muertes en su territorio a causa del virus, al tiempo que Corea del Sur reportó su primera. Y Japón señaló que dos expasajeros del crucero Diamond Princess han muerto por la enfermedad, lo que elevó la cifra de decesos a tres.
También este jueves se supo que una tripulante de ese crucero se convirtió en la primera chilena contagiada con el coronavirus, y se recupera en un hospital de Japón. La mujer de 45 años, cuya identidad no fue precisada, es el segundo caso de un latinoamericano afectado por la enfermedad.
AP / OnCuba