En Cuba, la campaña de frío 2020-2021 se ha visto marcada por limitaciones en la adquisición de fertilizantes y por la pérdida de cultivos. Esto afectará el cumplimiento de la demanda de alimentos del próximo año.
El director general de Agricultura del Ministerio de la Agricultura, Miguel Rosales Román, dijo que la campaña de frío de cultivos varios había comenzado el 1º de septiembre y que se extenderá hasta el 28 de febrero de 2021.
Con ella, expresó, se aseguraba entre el 60 y el 70 % de la producción del próximo año. Para la presente campaña se planificaron sembrar 378.000 hectáreas, lo que representa un crecimiento del 18 % del real sembrado en la anterior.
Hasta el cierre del 30 de noviembre, de 217.000 hectáreas se han sembrado 184.000, un atraso, subrayó, determinado por las permanentes lluvias y por los efectos de la tormenta tropical Eta.
En esas circunstancias, dijo, se atrasó la preparación de tierra, lo cual limitó la siembra y la campaña de frío, que abarca un período de seis meses. Ahora se debe realizar prácticamente en 90 días.
Se produjo, por consiguiente, un retroceso en los niveles de siembra y una caída en sus rendimientos.
Por otra parte, no se han podido importar los paquetes tecnológicos necesarios para que los cultivos rindan sus máximos resultados.
El funcionario añadió que debido justamente a la carencia de esos insumos, los rendimientos estarán por debajo de lo planificado en cultivos como el boniato. En condiciones óptimas, se obtienen 25/30 toneladas de boniato por hectárea. Hoy no sobrepasan las 10.
Aun cuando se están implementando varias alternativas, dijo, para el próximo año no se va a poder cumplir con las demandas de la industria y de la población.
Los eternos perdedores y los eternos fracasados, llevan 60 años con el poder, solo escusas y justificaciones: bloqueo, clima.