Ante los apagones de los últimos meses en Cuba, provocados por continuas roturas de las termoeléctricas y la escasez de combustible, vecinos de La Timba, municipio Plaza de la Revolución, decidieron buscar alguna forma de producir electricidad para sus casas. Y les dieron a los pedales, literalmente.
“La idea fue del profesor Eugenio, que es un bicho. En cuanto empezaron los apagones programados, instaló una bicicleta fija en el patio y empezó a darle corriente a su casa dándole a los pedales”, cuenta a OnCuba Iluminada Matienzo, una de las vecinas que participa en la iniciativa.
“En realidad, la idea no es mía, sino de quien inventó el dinamo”, aclara Eugenio de la Fuente, profesor de Física de Secundaria Básica y miembro de la asociación de innovadores en La Habana. “Lo que hice fue crear un amplificador que permite producir más energía eléctrica a partir de la energía cinética que genera el pedaleo”.
Gracias a su invento, y al pedaleo suyo y de sus hijos, Eugenio logró encender algunas luces y mantener su refrigerador funcionando durante los apagones. Incluso, por las noches, el televisor. Sus vecinos, claro, se dieron cuenta y le pidieron ayuda.
Así, en poco tiempo, y después de instalar entre su patio y el de un vecino una decena de bicicletas (muchas rescatadas del óxido y el olvido) y una red de cables entre ellas y las casas, toda la cuadra empezó a producir su propia corriente durante los cortes eléctricos, con turnos para pedalear entre los vecinos aptos para hacerlo.
Y fue cuando a Eugenio, Iluminada y algunos más se les ocurrió presentar un proyecto a las autoridades de La Habana. Lo que comenzó como una iniciativa vecinal podría convertirse el próximo año en un proyecto comunitario que involucre a muchos más residentes de La Timba.
De momento, cuentan con un local entregado por el Gobierno municipal y un primer lote de bicicletas estáticas financiado por una oenegé europea, además de las que han ido aportando los propios vecinos. Y mientras, el profesor Eugenio trabaja en un nuevo amplificador de más potencia, con la asesoría del Ministerio de Energía y Minas.
Sin embargo, el proyecto no está exento de obstáculos.
“La mayor dificultad es la mano de obra —reconoce Iluminada—. O los pies, en este caso. Hemos tenido problemas para convencer a la gente para que se sumen al proyecto, porque no todo el mundo está dispuesto a pasarse media hora dando pedales mientras otros aprovechan la corriente. Pero estamos buscando alternativas”.
Una variante es organizar los turnos por CDR “para que a cada cuadra le toque parejo”, aunque también valoran incentivos como ofrecerle a los voluntarios “un turno extra para comprar pollo y que no tengan que hacer cola cuando les toque, algo que ya estamos negociando con el gobierno provincial”, explica la mujer.
“También estamos en negociaciones con un par de gimnasios privados para que den sus clases de spinning en el local que nos dieron, y así matamos dos pájaros de un tiro: producimos electricidad y mantenemos a los vecinos en buena forma física”, añade.
De concretarse el proyecto, “el próximo paso es que funcione no solo durante los apagones, sino sistemáticamente, y que aporte energía al sistema eléctrico nacional”, adelanta Eugenio, quien ya sueña con que la iniciativa pueda generalizarse a otros barrios de La Habana y de toda Cuba.
No obstante, preguntadas al respecto por OnCuba, fuentes del Ministerio de Energía y Minas, y del Gobierno de La Habana, afirmaron no estar al tanto del proyecto y alertaron sobre el hecho de que la noticia se divulgue precisamente un 28 de diciembre.
Si usted creyó todo lo anterior, sepa que se trata en realidad de una broma inocente y de buena fe por ser hoy el Día de los Santos Inocentes, una jornada en la que muchas personas en Hispanoamérica hacen a sus amigos y allegados, y como la que también muchos medios de prensa dedican este día a sus lectores.
Y si alguien, a partir de esta nota fake, se motiva, investiga y presenta a las autoridades un proyecto inspirado en el aquí referido, le deseamos la mejor de las suertes y solo le pedimos que nos dé la primicia para, entonces sí, publicar la noticia en serio.