El presidente chino Xi Jinping le dijo el viernes a su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que el desarrollo de China “abrirá nuevas oportunidades” para Brasil y el mundo durante una reunión de ambos líderes en Beijing.
“China buscará un desarrollo de alta calidad, acelerará la creación de un nuevo paradigma de desarrollo y promoverá una apertura de alto nivel. Esto abrirá nuevas oportunidades para Brasil y los países de todo el mundo”, aseguró un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores chino.
Lula viajó a China para impulsar los lazos económicos con el principal socio comercial de Brasil y ratificar que su país “está de regreso” a la escena internacional y con intenciones de convertirse en mediador en el conflicto en Ucrania.
Lula fue recibido el viernes por el presidente Xi en una ceremonia ante el Gran Salón del Pueblo de Beijing. El mandatario brasileño asistió antes a una ceremonia en el Monumento a los Héroes del Pueblo en la plaza de Tiananmen y se reunió con el primer ministro chino, Li Qiang, antes de su reunión con Xi.
En Shanghái Lula cuestionó el uso del dólar como moneda global apenas semanas después de que su gobierno acordara comerciar con China empleando propias monedas.
“¿Por qué todos los países están obligados a hacer su comercio amarrados al dólar? Hoy un país necesita correr detrás del dólar cuando podría exportar en su moneda propia”, dijo.
Lula también se refirió críticamente al FMI en referencia a las acusaciones de que impone duros recortes presupuestarios a países atrapados por la deuda como Argentina a cambio de líneas de rescate.
“Ningún banco puede estar asfixiando las economías de países como está haciendo ahora en Argentina el FMI o como hicieron con Brasil durante tanto tiempo y con todos los países del tercer mundo”, dijo.
“La época en que Brasil estaba ausente de las grandes decisiones mundiales ya es cosa del pasado”, dijo en Shanghái, desde donde partió el jueves por la noche hacia Beijing. “Brasil está de regreso”, insistió.
“Queremos elevar el nivel de la colaboración estratégica entre nuestros países, ampliar los flujos de comercio y, junto a China, equilibrar la geopolítica mundial”, tuiteó la cuenta de Lula junto a una imagen con Zhao.
Ni China ni Brasil han impuesto sanciones contra Rusia, como han hecho las potencias occidentales, y tratan de posicionarse como mediadores para alcanzar la paz.