“De cara al mar, al puerto de La Habana, y mirando a la nación que conoció como pocos”, anunció Eusebio Leal a propósito de la ubicación de la escultura ecuestre de José Martí, réplica de la que se levanta en Nueva York y que ayer fue colocada en el Parque 13 de Marzo del Centro Histórico de la capital cubana.
Muchos transeúntes se detuvieron para ser testigos de este momento emocionante. Esta es la única escultura conocida que muestra a Martí en el momento de su muerte en el combate de Dos Ríos el 19 de mayo de 1895, ha dicho Leal, gran impulsor de la iniciativa de traer la reproducción a Cuba.
La obra original fue esculpida por la artista estadounidense Anna Hyatt Huntington por encargo del gobierno cubano. Concluida en 1959, mide 5,6 metros y fue inaugurada en el Parque Central seis años después, próxima a las esculturas de los próceres latinoamericanos Simón Bolívar y José de San Martín.
La pieza fue trasladada a la terminal habanera Sierra Maestra desde la Zona Especial de Desarrollo del puerto del Mariel, a donde arribó desde los Estados Unidos. A principios de 2016 el Museo de las Artes del Bronx y la Fundación Ford se aliaron en este empeño. Fue creado entonces el grupo Amigos de José Martí, con la intención de recaudar los más de 2 millones de dólares necesarios para realizar la reproducción en bronce de la escultura original y organizar otras actividades dedicadas al Héroe Nacional de Cuba.
En La Habana hay otras obras de Hyatt Huntington como “El relevo”, cerca cercanías de la Plaza de la Revolución, o el conjunto escultórico “Los portadores de la antorcha”.
