La Unión Eléctrica de Cuba (UNE) comunicó que el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se encuentra enlazado desde anoche después de la desconexión reportada por una falla en líneas de alta tensión de 220 kilovoltios (KV) que dejó sin corriente a casi la mitad de la isla.
“A las 6.49 minutos el sistema estaba conectado y a las 9.08 la falla estaba restablecida”, declaró el director técnico de la UNE, Lázaro Guerra Hernández, a la televisión estatal en la mañana de este martes.
En una información publicada en sus redes sociales, la UNE informó también que la avería que provocó la caída del sistema en la región centro-oriental de la isla se debió a “una quema de caña que había en la zona”.
“Al salir del sistema las dos líneas, fue cortada la transferencia de potencia entre la zona occidental–centro–oriental y provocó la caída del sistema desde Ciego de Ávila hasta Guantánamo”.
La UNE pronostica para hoy una afectación de 121 MW en el horario de mayor demanda, con una incidencia alta en la zona centro oriental por altas transferencia.
Disminución de apagones
El corte de suministro en la tarde del lunes ha sido uno de los mayores desde el pasado 27 de septiembre, cuando se alcanzó un momento de “cero generación” eléctrica tras el paso por el occidente del huracán Ian, con fuerza tres en la escala Saffir-Simpson.
Desde entonces los apagones han disminuido de forma notable, especialmente desde la segunda quincena de diciembre, y se han mantenido a niveles menores en las primeras semanas de 2023, con afectaciones por debajo del 10 % en horario de máxima demanda.
El sistema energético cubano se encuentra en una situación precaria, como se evidenció el año pasado, cuando los apagones eran diarios y prolongados, de hasta doce horas al día en algunas regiones. Las afectaciones llegaron en ocasiones a casi el 40 % del país.
Entre las causas de esta situación se encuentra la antigüedad de las ocho plantas termoeléctricas terrestres del país -con un promedio de más de 40 años en uso-, el déficit de inversiones en el sistema energético nacional y la falta de combustible para las centrales.
La situación se ha agudizado en los últimos años por la grave crisis económica que atraviesa el país por la confluencia de la pandemia, el endurecimiento de las sanciones de EE.UU. y los errores en la política monetaria nacional.
Los apagones tienen un importante coste económico, como ha reconocido el Gobierno cubano, y también generan descontento social, como se evidenció el año pasado.
Efe/OnCuba.