La ruptura de Evo Morales con el Movimiento al Socialismo (MAS), el partido que lideró por casi 30 años y lo llevó a la presidencia de Bolivia, se ha consumado oficialmente.
Morales, quien se mantiene enfrentado al actual presidente boliviano Luis Arce, presentó este jueves su renuncia a través de un documento tramitado por su abogado ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El exmandatario, que gobernó el país andino hasta su renuncia en 2019, pretende presentarse a las próximas elecciones, y al no poder hacerlo por su partido tradicional buscará ser el candidato de otra formación política: el Frente para la Victoria (FPV).
Al presentar la renuncia ante ante el Tribunal Electoral de la región de Cochabamba, el abogado Héctor Rodríguez apuntó que Morales y sus seguidores no podían formar parte de “un Gobierno que se ha corrompido y ha traicionado los principios básicos y fundamentales”.
Un reporte de la agencia EFE explica que el líder indígena había presentado su retiro oficial el martes mediante un delegado, pero el ente electoral la rechazó entonces bajo el argumento de que el trámite debía hacerse en persona, aunque luego le permitió hacerlo a través de un “poder específico notariado”.
Renuncia y fractura del MAS
Según explica el medio español, Evo Morales delegó la presentación de su renuncia debido a que se mantiene fuera de la vista pública en Cochabamba, su bastión político y sindical, rodeado de sus seguidores, los que también han comenzado a abandonar el MAS.
El expresidente ha sido centro de polémica en Bolivia por su enfrentamiento a Arce, los reveses judiciales a sus intentos de seguir liderando el MAS y presentarse a una nueva elección, y una investigación por el delito de trata agravada de personas, por la cual se emitió una orden de aprehensión en su contra.
A pesar de ello, sigue teniendo una amplia masa de seguidores, en particular entre los trabajadores cocaleros y los indígenas de su región de procedencia. Una parte de ellos ya comenzaron a renunciar al partido oficialista en respaldo al expresidente, y se espera que los abandonos continúen incluso hasta la antesala de las elecciones.
Evo reta a Arce por la candidatura del MAS a la presidencia de Bolivia
En los comicios pudiera darse un enfrentamiento entre Morales —quien gobernó Bolivia en tres ocasiones con el MAS (2006-2009, 2010-2014 y 2014-2019)— y Arce, que debe ser ratificado como el candidato oficial del partido en un congreso de esa formación previsto para abril.
La división en el MAS comenzó tras la crisis política de 2019, después de que Morales renunciara a la presidencia, luego de acusaciones de fraude y protestas en su contra al intentar un cuarto mandato, una revuelta golpista impulsada por la oposición.
Terminado ese período con la vuelta del Movimiento al Socialismo al poder, con Arce como presidente, las diferencias entre este y Morales han ido a más y hoy parecen irreconciliables.
Morales anunció días atrás su alianza con el FPV, que lidera Eliseo Rodríguez, por el cual se presentaría como candidato presidencial. Sin embargo, ello finalmente podría no suceder.
Aunque él insiste en que está habilitado para ser candidato, un fallo del Tribunal Constitucional ya lo vetó para ello, al establecer que la reelección en Bolivia es por “una única vez” de forma continua o discontinua, y él Evo se mantuvo en la presidencia por tres períodos seguidos.