La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) rechazó una solicitud de medidas cautelares a favor de la ex presidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez, según una carta publicada hoy viernes por el gobierno boliviano.
Acusada de participar en un golpe de Estado contra su predecesor, Evo Morales, Áñez se encuentra en prisión preventiva desde marzo. El 21 de agosto se autolesionó en la cárcel.
Se proclamó presidenta interina el 12 de noviembre de 2019 después de que Morales renunciara a su cargo al haber perdido el apoyo de mandos militares y policiales en medio de la fuerte convulsión social ocurrida tras la publicación de un informe de la OEA acusándolo de fraude en las elecciones de octubre de ese año.
Áñez dejó el poder en noviembre pasado al cabo de nuevos comicios en los que resultó electo Luis Arce, y en marzo fue detenida. Algunos cargos en su contra son genocidio, sedición, terrorismo y conspiración.
“El expediente correspondiente a la presente solicitud de medidas cautelares fue oportunamente cerrado”, indica la carta enviada por el gobierno a la agencia de noticias Afp y firmada por la secretaria ejecutiva de la CIDH, Tania Reneaum.
La carta insta al Estado boliviano continuar “garantizando las condiciones dignas de detención” de la ex mandataria y pide que se mantengan “las visitas y el acompañamiento permanente de sus familiares”.
La defensa de Áñez había solicitado las medidas cautelares a fines de agosto, señalando “amenazas, hostigamientos y agresiones en contra de la vida e integridad personal de la ex mandataria”.
El canciller boliviano Rogelio Mayta celebró la respuesta de la CIDH y dijo que “no ha estado en riesgo en ningún momento la vida de la señora Jeanine Áñez por alguna conducta de la institucionalidad boliviana”.