La ayuda para Cuba anunciada un mes atrás por el Gobierno de Estados Unidos tras el paso del devastador huracán Melissa todavía no ha llegado a la isla.
Valorada en 3 millones de dólares, esa ayuda se entregaría a través de la organización de la Iglesia católica Cáritas y se destinaría a los damnificados del huracán. Sin embargo, según explicó a la agencia EFE la directora de Cáritas Cuba, Carmen María Nodal, la misma “está aún en proceso”.
“No se ha recibido aún la ayuda (estadounidense), está aún en proceso. Se recibirá en bienes materiales, para las diócesis afectadas, y será entregada por las Cáritas Diocesanas”, indicó al medio español.
En un reporte sobre el tema, EFE asegura haber contactado a la Embajada de EE.UU. en La Habana, pero hasta el momento no ha recibido respuesta.
La agencia recuerda que hace un mes el Departamento de Estado notificó en sus redes que se estaba “coordinando con la Iglesia católica la distribución de 3 millones de dólares en asistencia humanitaria directamente a aquellos más afectados en el oriente de Cuba por la devastación del huracán Melissa”.
Entonces, el Gobierno cubano agradeció ese “gesto humanitario” de Washington, pero afirmó que, como en ocasiones anteriores, la ayuda sería “canalizada” por vías institucionales en cooperación con la Iglesia Católica.
Gobierno cubano agradece ayuda desde EEUU y avisa que la “canalizará” junto con la Iglesia
“Se necesita de todo”
En declaraciones a EFE la directora de Cáritas Cuba consideró que actualmente “se necesita de todo” en las regiones afectadas por Melissa: de agua potable a alimentos no perecederos, pasando por productos de higiene y aseo.
También son muy necesarios medicamentos, especialmente “debido a la epidemia de arbovirosis”, de chikungunya y dengue, apuntó.
Nodal resaltó también la necesidad de “techos” para las viviendas afectadas por el huracán y de “recursos que permitan el aprovechamiento de la tierra para el cultivo de alimentos de ciclos cortos que ayuden a garantizar la alimentación del pueblo en estas circunstancias”.
Según dijo, Cáritas ha estado muy activa en el oriente cubano desde el paso de Melissa. Su labor se ha concentrado en ayudar a los cientos de miles de damnificados por el huracán, gracias a donaciones recibidas desde otros países, incluido Estados Unidos.
La organización católica ha colaborado, por ejemplo, en la entrega de alimentos recolectados por la arquidiócesis de Miami, que ha fletado cuatro aviones con donaciones hasta la fecha que ya han llegado a la isla.
También ha trabajado en el reparto de alimentos y otras donaciones con World Central Kitchen (WCK), la ONG del chef español José Andrés; los Servicios Católicos de Ayuda (CRS); y la embajada de Polonia en Cuba.
WCK ha repartido 7 mil kits de alimentos a familias y útiles de cocina —como un millar de ollas multipropósito o reina—, y los CRS entregaron mil 625 carpas para familias con daños en el oriente de Cuba, enumeró el reporte de EFE.
A un mes de Melissa
El huracán Melissa entró en Cuba en la madrugada del miércoles 29 de octubre con categoría 3 en la escala Saffir-Simpson. Atravesó el oriente del país durante unas siete horas, con rachas de hasta 200 km/h, lluvias torrenciales y marejadas ciclónicas que generaron extensas inundaciones.
Como resultado, la zona oriental sufrió cuantiosos daños materiales, aunque no víctimas mortales, según el Gobierno cubano.
De acuerdo con las cifras recientes, se afectaron unas 149 mil viviendas, así como 600 centros médicos y 2 mil escuelas, entre otras edificaciones. También sufrieron severos daños las infraestructuras eléctrica, hidráulica y de telecomunicaciones, las vías de transporte y unas 158 mil hectáreas de cultivos.
Para hacer frente a esa situación, Naciones Unidas presentó un plan de acción de 74,2 millones de dólares para atender a una población afectada de en torno a un millón de personas, algo más del 10 % de la población del país, aunque otros cálculos elevan la cifra por encima de los 2 millones.
Además, desde el paso del huracán agencias multilaterales, ONGs como la Cruz Roja y gobiernos de países como China, Venezuela, España, Colombia, Corea del Sur y México han enviado alimentos y ayuda humanitaria a Cuba.
