Redacción OnCuba
Las autoridades cubanas informaron este sábado que extienden nuevamente y hasta diciembre la posibilidad de que los viajeros puedan entrar a Cuba alimentos, útiles de aseo y medicamentos sin límites ni aranceles.
Se prorroga a partir del 1 de julio y hasta el 31 de diciembre de 2022 “la importación sin carácter comercial de alimentos, aseo y medicamentos, por la vía de pasajeros como equipaje acompañado, sin límites en valor, cantidades y libre de pago de aranceles”, comunicó la Aduana General en su página web.
La información aclara que, para el disfrute de este beneficio, es necesario que los viajeros diferencien estos productos de artículos de otra naturaleza en sus equipajes.
“Se prorroga además hasta el 31 de diciembre, los beneficios arancelarios otorgados por el Ministerio de Finanzas y Precios, relacionados con la importación de estos productos por entidades nacionales, así como para los insumos y materias primas que las entidades autorizadas le importan a las formas de gestión no estatal”, añade la nota.
La medida fue anunciada luego de las protestas antigubernamentales del 11 de julio pasado, donde una de las primeras causas económica fue la escasez y el desabastecimiento de productos básicos y medicinas.
Crece importación de medicina, aseo y alimentos por viajeros que arriban a Cuba
El Ministerio de Finanzas y Precios emitió una segunda resolución en diciembre pasado que extendió la medida hasta el 30 de junio de 2022. Ahora, asegura el ministerio que no se eliminará esta decisión temporal de flexibilización “atendiendo a que se mantienen las condiciones que fundamentaron esta medida”.
La legislación vigente en Cuba sobre la importación de equipaje consiste en un complejo sistema de puntos y límites de peso que establece aranceles a los excesos de artículos traídos por los viajeros. En el caso de los medicamentos, se permite introducir en el país hasta 10 kilogramos.
La crisis económica en Cuba se agravó con la pandemia de coronavirus, las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos y los fallos en la gestión macroeconómica interna.
Con información de EFE
