Un incendio provocado en el interior del Teatro Amadeo Roldán, en La Habana, fue controlado rápidamente gracias a la intervención inmediata del Cuerpo de Bomberos.
A pesar del fuego, causado por actos de “personas ajenas a la institución”, no se reportaron daños materiales significativos ni víctimas, aseguró en Facebook la presidenta del Instituto Cubano de la Música, Indira Fajardo.
De acuerdo con Fajardo, se trabaja actualmente en establecer medidas de seguridad para “prevenir que hechos similares se repitan en el emblemático recinto cultural”.
El Teatro Amadeo Roldán, ubicado en la esquina de Calzada y D en El Vedado, La Habana, es una institución cultural inaugurada en 1928 bajo el auspicio de la Sociedad Pro-Arte Musical, liderada por María Teresa García Montes de Giberga.
Nombrado en honor al destacado compositor cubano tras la Revolución de 1959, este recinto se destacó por su acústica excepcional y su capacidad para 886 espectadores en la sala principal, además de la sala García Caturla con 276 asientos.
Sin embargo, su historia ha estado marcada por tragedias y negligencia: un incendio provocado por un pirómano en 1977 lo destruyó casi por completo, y aunque fue reinaugurado en 1999 tras una extensa restauración, los trabajos fueron deficientes, dejando una estructura vulnerable al paso del tiempo.
El deterioro del Teatro Amadeo Roldán se acentuó en las últimas décadas, evidenciando un abandono progresivo. Tras su reapertura en 1999, funcionó apenas una década antes de cerrar nuevamente en 2010 debido a problemas estructurales graves, como filtraciones y riesgo de colapso.
Reportes de 2023 destacan problemas como goteras que afectaron a músicos e instrumentos durante presentaciones, mientras que la vegetación ha invadido partes del edificio, convirtiéndolo en refugio para personas sin hogar.
A pesar de promesas gubernamentales en 2020 de reabrirlo en 2022, el proyecto no se concretó, y el teatro permanece en un estado de ruina, opacando su legado como sede de la Orquesta Sinfónica Nacional y escenario de eventos internacionales.
En la isla se han vuelto recurrentes los reportes de incendios en instituciones y edificaciones en los últimos tiempos. Hace apenas dos días, uno de “regulares proporciones” se desató en el centro de la ciudad de Pinar del Río. No se reportaron lesionados. El siniestro tuvo “muchas vías de propagación” y las llamas consumieron la Unidad Empresarial de Base (UEB) Forestal y dos viviendas; una de ellas un negocio particular.
Mientras, el pasado 6 de marzo se produjo otro incendio en Varadero que no comprometió ni la seguridad ni la experiencia de los turistas, de acuerdo con fuentes oficiales. El fuego tuvo lugar en “una instalación sin uso directo al cliente” y fue controlado “de manera efectiva sin ocasionar pérdidas humanas ni afectaciones al desarrollo de las actividades en el balneario”, precisaron autoridades locales citadas por la prensa.
No hace falta, ya los daños significativos los tiene por el completo abandono en que está, me imagino que ya aplica para demolición