La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció este miércoles que mantiene la emergencia internacional por la pandemia de la COVID-19, declarada desde hace casi dos años, en un momento de cifras récord de contagios debido a la variante Ómicron, aunque ésta parece estar más asociada a casos leves de la enfermedad.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus decidió mantener el nivel de alerta por recomendación del Comité de Emergencia para la COVID, que celebró su décimo encuentro de expertos el pasado día 13 aunque ha tardado seis días en hacer públicas sus decisiones.
En la reunión, que duró cinco horas, se subrayó que la actual ola de contagios asociados a la variante Ómicron sigue constituyendo grandes desafíos, debido a la presión que impone a los sistemas sanitarios de todo el mundo.
Los expertos coincidieron en que las vacunas anticovid no han eliminado el riesgo de transmisión del coronavirus SARS-CoV-2 causante de la COVID-19, pero siguen siendo efectivas a la hora de reducir el riesgo de formas graves y mortales de la enfermedad.
Entre las recomendaciones del comité, destaca su petición de que se “levanten o reduzcan” las restricciones a los viajes internacionales, “ya que no proporcionan un valor añadido y contribuyen a las dificultades sociales y económicas de los Estados”.
También aconsejan que la prueba de vacunación no sea un requisito de entrada en un país, dada la falta de acceso a vacunas en muchos países, especialmente en economías en desarrollo.
A este respecto, el comité pide más esfuerzos y solidaridad para aumentar las tasas de vacunación, especialmente en aquellas naciones en las que no alcanzan todavía el 10 %.